Llevamos en nuestro corazón a todos los que han hecho posible Errantes de la ciudad. Queremos agradecer muy especialmente a:
Las Mujeres Errantes Ana Francisca, Carmen, Karen, Yuri, Daniela, Paola Andrea, Jackeline, Jeimi, Alexandra, Lizeth, Melissa, Claudia, Marcela, Yeraldin, Lina María, Claudia E, Diana Marcela, Carolina, Tatiana U, Corina, Olga, Yaqueline, Sandra Paola, Tatiana T, Marleny y Edelmira, gracias infinitas.
Carmenza Porras y María del Rosario Estrada, por creer y apoyar de manera incondicional a “Errantes de la ciudad”.
David Ramírez. por sus hermosas fotografías, su sensibilidad y compromiso con el proyecto.
Salomé Bravo, Raúl López, Corina Estrada y Carlos Cantor, por su presencia y apoyo. Fue una alegría contar con ustedes. A Sofía Gutiérrez y alPadre Ricardo Martínez, por acercar a las mujeres de Soacha a “Errantes de la ciudad”. Mario Germán Paredes, por poner el corazón en cada preparación culinaria. A Alejo Calderón pos las fotos y Andres Tudela por el registro el día de la intervención.
A Camilo González Posso, por confiar en la obra y acoger a “Errantes de la ciudad”, abriendo las puertas del Centro de Memoria, Paz y Reconciliación de Bogotá.
Yamil Iván Rojas y Diana Lucía Herrera, del Terminal de Transportes de Bogotá D,C, Sede Salitre por acoger y comprender el proyecto, permitiendo la intervención artística en este espacio.
Maria Victoria, por su maravillosa asesoría, y la confianza e intuición con la cual nos ayudó a tejer “Errantes de la ciudad”. Y claro, por todas las tardes que pasamos soñando y lenguajeando.
León David, por ofrecer a “Errantes de la ciudad” la poesía única del sonido. Y por hacer vibrar al Terminal de Transportes de Bogotá, D.C.
Renata, por entregar su ser al proyecto con apertura y alegría, dando un soporte fundamental en la intervención y el proceso.
Ricardo, por sorprendernos y ayudar a tejer entre nosotras la fuerza del aliento, el hogar y la vida.
Juliana, Martha y Laura de La MoVida, quienes con ternura y disposición nos dieron elementos para abordar de manera más consciente, el trabajo corporal con las telas.
A ustedes y todos los otros que nos apoyaron infinitas gracias.